"Decidimos seguir la tradición familiar vitivinícola y fundar el negocio donde la pasión por la tierra y la sostenibilidad son nuestra guía diaria".
Esta historia se enmarca en la rica tradición vitivinícola ecológica. Han logrado crear vinos que destacan por su calidad y singularidad. A través de su trabajo, han expandido su presencia en mercados internacionales, todo mientras rinden homenaje a la tierra que les ha dado tanto. En esta entrevista, conoceremos más sobre Bodegas Tempore y su apasionante viaje en el mundo del vino. ¡No te lo pierdas!
La familia Yago Aznar cuenta con 4 generaciones de experiencia en el sector. ¿Cómo fueron vuestros inicios?
En 2022, mi hermano Víctor y yo iniciamos nuestro proyecto. Provenimos de una familia de viticultores; tanto nuestros padres como nuestros abuelos han trabajado las viñas en Lécera, una tierra con gran tradición de viña y de garnacha. Sin embargo, fuimos nosotros quienes decidimos dar el siguiente paso: elaborar y comercializar nuestros propios vinos, y así nació Bodegas Tempore.
Tuvimos claro desde los inicios nuestra apuesta por las variedades autóctonas, como la garnacha y el tempranillo, destacando la singularidad de nuestro territorio y la viticultura ecológica. Estos pilares que marcaron el inicio del proyecto continúan siendo fundamentales hoy: el respeto por la Tierra y la pasión por el vino.
Habéis recuperado la variedad Derechero de Muniesa. ¿Cómo surgió este proyecto?
Conocer nuestro territorio, el entorno y la historia que le rodea son aspectos fundamentales para desarrollar nuestros proyectos.
La variedad Derechero o “Drechero” como lo llaman en Muniesa, es conocida entre todos los viticultores de nuestra zona. Estamos ubicados a 20 km de distancia, siendo pueblos vecinos que conviven, se conocen y comparten conocimiento.
Fue Félix Yus quien tomó la iniciativa de participar en el proyecto del CTA (Centro de Transferencia Agroalimentaria) del gobierno de Aragón para recuperar una variedad de uva, única en Aragón y a punto de desaparecer.
Tan pronto como conocimos la propuesta nos sumamos a la misma y tras más de siete años de trabajo y seguimiento, en 2021 lanzamos al mercado la primera añada del vino de variedad Derechero. Desde entonces, seguimos creciendo con este vino logrando expandirnos tanto en el mercado nacional como en el internacional.
Después de décadas de trabajo, ¿Qué hace que vuestros vinos sean tan especiales? ¿Dónde reside el secreto de vuestro éxito?
Sinceramente no hay ningún secreto; solo hay trabajo, constancia y pasión por lo que hacemos.
Nuestros vinos tienen en su esencia el alma en la tierra donde nacen, un territorio inhóspito, tierra de sed y de sol. Esta singularidad se refleja en cada botella: vinos aromáticos, afrutados, con colores vibrantes y con un fondo mineral propio de los suelos donde crecen.
La recuperación de suelos, el cuidado de las viñas y el compromiso con la sostenibilidad del cultivo ecológico son factores que contribuyen a hacer únicos cada uno de los vinos de nuestra bodega.
Calificasteis de exitosa la vendimia el año pasado, en 2023. ¿Cómo ha ido este año 2024?
Cada vendimia supone un nuevo reto, ya que dependemos de la climatología y esta es siempre distinta. Nuestra materia prima está constantemente expuesta a los cambios de temperatura, sol y lluvia, lo que añade un factor de incertidumbre cada año.
En cuanto a este 2024, ha sido especialmente seco en los primeros siete meses, con un verano marcado con constantes cambios de temperatura, aspectos que no ayudan a la maduración regular de la uva… ¡Pero, llegaron las lluvias a final de agosto y principios de septiembre y se obró el milagro!
Las uvas ganaron volumen, mantuvieron su acidez y pH y la maduración llegó a buen término, lo que nos ha permitido tener una buena cosecha en cantidad y calidad.
Apostáis por una viticultura ecológica y sostenible. ¿Cómo lo conseguís? ¿Creéis que es el punto diferenciador de Bodegas Tempore?
De esa manera es la única forma en la que entendemos el viñedo. Trabajar en ausencia de herbicidas, pesticidas o fungicidas es trabajar por un producto de mayor calidad y por un futuro más sostenible. Estas son premisas imprescindibles en nuestro día a día. La viticultura ecológica implica escuchar a la tierra y a la viña, estar atentos a los cambios y trabajar para la prevención de posibles enfermedades de la vid.
No sé si es el punto diferenciador en nuestra bodega, pero sin duda es un valor añadido muy importante, especialmente cuando nos dirigimos a los mercados internacionales, donde la demanda de vinos ecológicos y biodinámicos crece a un ritmo superior a los vinos convencionales. Actualmente exportamos el 85% de nuestra producción a más de 35 países.
Durante casi veinte años fuimos la única bodega en Aragón dedicada a esta producción y desde hace cinco años somos la única certificada en biodinámica en Aragón.
Contáis con un servicio de enoturismo. ¿Cuántas visitas podéis llegar a recibir al año?
Así es, ofrecemos diversas experiencias enoturísticas, desde catas en pareja, visitas guiadas a la bodega hasta catas para grupos e incluso visitas al viñedo durante la vendimia.
Aunque es complicado dar una cifra exacta de visitas, las épocas de mayor afluencia suelen ser primavera y otoño, especialmente los fines de semana con una mayor actividad en las mañanas de los sábados.
Últimamente habéis recibido diversos premios ¿Qué significa para vosotros el reconocimiento que se os ha otorgado a través de los premios conseguidos?
En cuanto a los reconocimientos a nuestros vinos, destacamos por un amplio curriculum de medallas, la mayoría de oro obtenidas por diferentes vinos que producimos. Estos premios vienen de concursos internacionales a los que mandamos nuestros productos, lo que nos ha permitido abrir camino hacia nuevos mercados y clientes
Por otro lado, los reconocimientos a la empresa han crecido notablemente en los últimos cuatro años:
- Premio ARAME Excelencia empresarial en 2021
- Premio Marketing Internacional de AREX en 2022
- Distinción de honor a la excelencia medioambiental de Heraldo de Aragón en 2022
- Premio Con Mucho Gusto a la trayectoria como empresa familiar de Heraldo de Aragón en 2024
Recibimos cada uno de estos galardones con enorme ilusión y gratitud; sin duda son el impulso que nos motiva a seguir mejorando y trabajando día a día.
En vuestra opinión, ¿Cuál es el principal reto del sector vitivinícola?
Actualmente son varios retos a los que nos enfrentamos, entre ellos el cambio climático y la falta de relevo generacional en el campo. Pero creemos que si hay que destacar uno en concreto es el descenso del consumo entre las nuevas generaciones.
Buscar la conexión con el público más joven para transmitirles el valor de lo que significa la unión del vino y el territorio a la tradición y la cultura mediterránea. Y todo esto con un lenguaje y con un tipo de producto que les resulte atractivo… ¡Es un gran reto!